jueves, 18 de junio de 2015

La piedra en elzapato. De los difuntos políticos.



La piedra en el zapato, azote de huleras y culebros.
De los difuntos políticos.
Por Manuel Ábrego.
   Los ciclos se cierran, si no, no serían ciclos. El del Partido del Trabajo cerró en estas elecciones, y es un lastre menos para el contribuyente mexicano. El PVEM, así como Movimiento Ciudadano y otros han retornado a su cajón de escritorio para servir en las próximas elecciones.
   Son difuntos insepultos que no dejan vivir a los vivos, pues su aparición si bien contribuye a la Democracia, ayuda al Revolucionario Institucional igual que hace el abstencionismo para hacerle mal obra a los institutos políticos serios y perseverantes.
    En Tres Valles alguna vez el Ing. Jesús Sánchez Cano hizo el comité local del PT, que fue de las pocas veces que no lo tuvo don Valentín Reyes López. En diferentes ocasiones perdió su registro en el País, lo recuperó y parece que ahora es la definitiva.
    De juguete político que alcanzó relevancia durante el Salinismo, pasó a comparsa de la seudo izquierda, y en Tres Valles no fue la excepción. Hoy se le despide en la inteligencia de que en política pocos mueren, y nadie responde del futuro.
     Quedan en este municipio tres partidos, el PAN y el PRI, constantes en mantener oficina y secretaria, y uno que va bien, pero le falta demostrar más en este municipio, MORENA. No obtuvo los votos del total de los afiliados que presumía, pero un viaje de mil millas comienza con un paso.
    El PVEM a menos que lo mantenga el PRI, va a estar en chino que levante una membresía significativa y por lo consiguiente que mantenga una oficina y pague una secretaria. A MORENA le da facilidades con el local Don Gil Arano, y la labor secretarial la desempeñan sus afiliados.
   El PAN, entre lo que llega de Xalapa por parte del Comité Estatal y algunas cooperaciones voluntarias de ocasiones difíciles, paga renta y secretaria, ya que sus regidores no cooperan aquí sino que lo mandan a la capital del estado. Del PRI ni se diga, es el hijo consentido de las finanzas mexicanas.
    ¡En la torre!, dijo el buitre y siguió bailando, pero al ritmo de: “PT, yaces y haces bien. / Tú descansas, yo también”.

No hay comentarios: