Desilusión,
coraje, amontonamiento y calor en reparto de vales para TV.
*Termina mañana
lunes, el martes, posible entrega de los aparatos.
Manuel Ábrego.
Tres Valles,
Ver. Hubo de todo en la lectura de agraciados para recibir un vale canjeable
por una televisión: desilusión, coraje, amontonamiento y calor.
Desde temprana hora, ancianos remolcados por
sus hijos, nietos y a veces por amigos u otro senecto, se amontonaron a las
puertas del Palacio municipal esperando oír su nombre en la lista de afortunados
con la dádiva de una televisión que ayude a sobrellevar su vejez o quizá a la
economía.
“Vienen los bloques de nombres desde el
Gobierno Federal, el que oiga el suyo levante la mano, el que no será en otra
ocasión”, decía una mujer que coordinaba la lectura de la lista de nombres.
También aclaró que en el caso de que el
favorecido con el obsequio de uno de los televisores no pudiera presentarse por
impedimentos propios de sus años, un hijo o nieto lo podría representar y
recibir el vale.
Se leía un bloque, se acababa y los que no
oyeron su nombre se retiraban desilusionados, a dialogar con los encargados de
las listas, a buscar algo de sombra o algún medio para refrescarse en lo que se
leía el siguiente bloque.
Los empleados que leyeron las listas
adelantaron que mañana termina el reparto de vales, y que el martes veintidós
podría ser la entrega de dichos estímulos del Gobierno Federal.
Entre quienes salieron con coraje por no
haber sido nombrados, había gente de Las Yaguas, cabecera municipal, Novara y
otras localidades, que se presentaron ilusionados por amigos o conocidos que
les aseguraron que el reparto iba a ser parejo para todos los adultos mayores.
El lunes se entregarán en las comunidades,
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